Los directores financieros han superado desde hace tiempo, las funciones tradicionales de contabilidad y gestión de operaciones bancarias.

Hoy en día los directores financieros tienen ante sí nuevos retos ya que sus funciones, dentro de la estrategia general de las empresas, son esenciales y afectan al cumplimiento de los objetivos.

La época en la que el director financiero se dedicaba a hacer apuntes contables, ejecutar procesos financieros y recopilar datos para informar al resto de departamentos acerca de la evolución del negocio se ha quedado atrás.

En la actualidad el director financiero está asumiendo tareas que aportan valor a la organización, al tiempo que se interrelaciona proactivamente con otros departamentos y la Dirección de la compañía, desempeñando un papel muy activo en la estrategia corporativa.

El director financiero juega un papel crucial en la estrategia empresarial siendo un perfil conectado, estratégico y más informado que nunca.
Las empresas cada vez más experimentan una mayor proactividad por parte del director financiero basando su trabajo en la eficiencia en las comunicaciones, el trabajo colaborativo, la agilidad en la actividad, el análisis de datos, los cuales reflejan un escenario más avanzado en el que la Dirección Financiera es quien se anticipa a las decisiones y es promotora de la digitalización de la compañía.

Desde Genial Pymes le recomendamos 7 consejos para una estrategia financiera efectiva.

1. Automatizar procesos.
Hay muchas tareas periódicas que no requieren la atención permanente del supervisor contable. Por lo que cada organización debe seleccionar aquellos procesos que no requieren atención específica y automatizarlos para centrarse en las actividades que sí generan valor para la empresa.

2. Analizar los estados contables para adelantarse a las decisiones.
Tener siempre actualizado el balance y otros estados contables es una tarea decisiva para poder conocer el estado financiera de la empresa: liquidez, tesorería, apalancamiento financiero, ratios de solvencia, etc.
Tener estos datos presentes actualizados a través de informes, indicadores y cuadros de mandos, incorporados al ERP, los cuales permiten al director financiero adelantarse a situaciones futuras y tomar decisiones más acertadas.

3. Gestión dinámica.
La dirección financiera moderna trabaja con presupuestos dinámicos, que van modificándose conforme cambia la situación interna y externa del negocio.

4. Analizar los costes.
La rentabilidad de una empresa siempre depende de los ingresos y los gastos. Una tarea fundamental del director financiero es la de conocer cuál es la estructura de costes para cada proceso que se realice, ayudando a detectar incidencias en los costes, para solucionarlos y así permitir ajustar la cuenta de resultados y mejorar la rentabilidad.

5. Analizar las fuentes de financiación y tesorería.
El análisis de las fuentes de financiación con la ayuda de soluciones digitales ayuda a conocer si estamos financiándonos en exceso de forma externa, o si resulta más conveniente apoyarse en financiación propia. Establecer el nivel de tesorería adecuado es ahora más fácil con las nuevas soluciones ERP.

6. Políticas de cobros y pagos.
No solo hay que vender, también hay que cobrar y pagar. Una de las tareas de los directores financieros es la de asegurar que el plazo de pago sea el más largo y que el de cobro el más corto.
Estos periodos de cobros y pagos deben establecerse cliente por cliente y proveedor por proveedor. Integrar el software financiero y de operaciones (ERP) con el CRM de ventas permite realizar esto de forma sencilla y en tiempo real, creando alarmas que avisen con antelación de posibles desfases.

7. Evitar bases de información y datos dispersos en múltiples sistemas.
Todas las actividades de la empresa tienen su impacto en las finanzas. Por lo que, lo ideal es que todas las áreas estén integradas en un solo sistema, pero es clave en el área de finanzas, fabricación, logística, compras y ventas porque su relación directa.
De forma que es recomendable vincular la información de un CRM que permita al director financiero realizar un seguimiento de la situación individual y de igual forma que de manera conjunta.